La crisis con COVID-19 ha llevado a que muchos gobiernos habiliten tecnologías digitales para poder llevar un registro y control de las personas contagiadas, ya sea a través de aplicaciones para teléfonos móviles, sitios web o incluso drones. ¿Son estas tecnologías armoniosas con el respeto de los derechos humanos?
El informe ha acogido nuestro reportes "Empresas y derechos humanos: informe regional sobre Tecnología, Big Data y Cibervigilancia", así como también "Recomendaciones para la transparencia y anticorrupción en la adquisición y uso de tecnologías de vigilancia por parte de los Estados Americanos" hecho en ocasión del Summit De Las Américas del 2018.
Como consorcio de organizaciones, nos complace haber ofrecido una perspectiva regional colectiva sobre los retos en la ética y la protección de datos pero, al mismo tiempo, nos preocupa que este tipo de debates en la Inteligencia Artificial (IA) sean ampliamente dominados por la industria, en desmedro del interés público.